El Método Pilates es un entrenamiento físico cuyo objetivo es fortalecer y flexibilizar la musculatura y alinear las articulaciones.

Cualquier persona puede entrenar para ser más fuerte, más flexible y tener una buena postura a base de alinear correctamente sus articulaciones, sin embargo, el Método Pilates no debe ser practicado por todo el mundo.

Casos en los que no es aconsejable el entrenamiento de Método Pilates

Caso 1 – Si tu médico no te aconseja entrenar.

En ciertos casos el médico pide al paciente que no se mueva durante un tiempo, quizás durante una larga temporada. Si no estás de acuerdo con tu médico pide una segunda, incluso una tercera opinión. Es más, la Seguridad Social te ofrece la posibilidad de hacerlo. Pero nunca practiques actividad física sin que un doctor te lo recomiende.

Algunos médicos aconsejan la práctica de Método Pilates sin conocer realmente qué es Método Pilates. Tu instructor te realizará un estudio personalizado (anamnesis) antes de comenzar a entrenar donde determinará si te es posible entrenar de forma saludable.

Caso 2 – Tener menos de 12 años.

Según multitud de estudios científicos sobre el desarrollo cognitivo y físico del ser humano, antes de los doce años no se ha desarrollado por completo las cualidades psicomotrices necesarias para entrenar Método Pilates tales como coordinación, equilibrio, propiocepción…

Y entonces te preguntarás, ¿cómo conseguir desarrollar estas cualidades si no son entrenadas? Deben ser entrenadas desde la más temprana infancia, de hecho, las cualidades psicomotrices se encuentran en el currículum oficial de Educación Infantil en España, es decir, se trabajan con niños desde tres años. Pero una cosa es realizar actividades de psicomotricidad y otra decir que un niño de tres años puede entrenar Método Pilates. Hasta los doce años es posible realizar juegos y cuentos motrices que vayan desarrollando las cualidades que en un futuro serán necesarias para entrenar Método Pilates.

Alternativa: para que los niños se introduzcan al entrenamiento del Pilates: el juego

Recuerdo el comentario de un buen amigo entrenador de fútbol para niños: “Los primeros años me centro más en que no se coman la tierra del terreno de juego que en enseñarles técnicas y tácticas del deporte.”

El niño, año tras año de juegos, debe aprender a saber cómo comportarse en una clase de Método Pilates, es decir, que es muy importante estar en silencio, escuchar al instructor, concentrarse en el movimiento, interpretar las sensaciones que ofrece tu cuerpo en cada ejercicio y saber expresarlas al entrenador para que ajuste el entrenamiento. Conseguir que un niño aprenda a estar en silencio, logre interesarse realmente por la actividad, muestre el nivel de concentración exigido para ejecutar los movimientos de Método Pilates correctamente es preciso muchos años.

¿Cómo conseguirlo? Sin duda con la mejor técnica que hemos conocidos los maestros de educación física hasta hoy: el juego. Así que hasta los doce años los niños deben jugar, y sus entrenadores deben diseñar juegos para ellos con los que obtengan los objetivos precisos para que en un futuro sean capaces de entrenar Método Pilates.

No dudo que existen niños de ocho años con una inmensa capacidad de concentración y propiocepción que les permita atender durante una hora seguida a su instructor y aprovechar su clase como un adulto. Sin embargo, no son frecuentes estos casos.

Las personas de todas las edades deben pasar por una anamnesis (estudio de sus condiciones físicas) previa al entrenamiento. En ese momento podemos determinar si el niño puede ubicarse en un entrenamiento tipo juego o realmente le es posible comenzar a entrenar en Método Pilates.

Caso 3 – Si estás embarazada… puedes practicarlo según las circunstancias

Si estás embarazada no practiques Método Pilates. Pero, ¡que no cunda el pánico! Quiero decir  si estás embarazada no practiques Método Pilates como tal. Existen entrenamientos especializados del método Pilates para embarazadas. Asegúrate de que te pones en manos de un profesional cualificado para impartir clases de Método Pilates en embarazadas.

Las embarazadas deben realizar una rutina de ejercicios de Método Pilates entendiendo el Método Pilates como un Entrenamiento Personal absolutamente diferente al que hayan realizado hasta el momento.

Esto es así, porque sus cuerpos son distintos:

  • A nivel biomecánico muestran cambios en:
    • La distribución de masa en su cuerpo.
    • La pisada.
    • Las curvaturas de la columna.
  • A nivel fisiológico:
    • Variaciones hormonales.
    • Aumento del volumen de sangre.
    • Mayor solicitud de oxígeno.

Y, además, los objetivos son diferentes al resto de personas no embarazadas.

Las embarazadas deben preparar su cuerpo para las variaciones que va a sentir:

  • Durante el embarazo:
    • Piernas hinchadas.
    • Cambios en la curvatura de la columna.
    • Estreñimiento.
    • Cansancio.
  • Durante el parto:
    • Precisan un suelo pélvico sano.
    • Piernas, abdomen y brazos fuertes.
  • Tras dar a luz  es necesaria:
    • La recuperación del suelo pélvico y el abdomen.
    • Realineación de las articulaciones.
    • Fuerza en extremidades superiores para evitar daños en la cervical y espalda. La madre debe sostener repetidas veces a su bebé que cada día pesa más.

Si estás embarazada, pregunta a tu médico si te aconseja realizar Método Pilates. A continuación, contacta con un centro especializado en Método Pilates para Embarazadas para recibir tus sesiones de Entrenamiento Personal.

¿Y tú? ¿Puedes realizar entrenamiento de Pilates?

Si tu caso no es ninguno de los mencionados más arriba. Sí, puedes y debes practicarlo. Los beneficios son múltiples y te hablamos ellos en este mismo blog.

En resumen, el Método Pilates es una actividad física no lesiva, siempre y cuando:

  • El profesional se encuentre cualificado.
  • El alumno disponga del permiso médico.

Así que ¿a qué esperas? Si te encuentras en alguna situación donde dudas si debes o no practicar Método Pilates estaremos encantados de atenderte. ¡Pregúntanos!